“Con Jesús y con María… Misioneros toda la vida” lema con el cual se identifica el Grupo Misionero Juan Pablo II (GMJP) de la Unidad Educativa Salesiana “María Auxiliadora” de Cuenca. El GMJP está conformado por varios jóvenes, quienes llenos del espíritu salesiano de Don Bosco, se reúnen los jueves cada quince días para compartir experiencias y así mismo prepararse para las misiones y distintas obras sociales.
Estos jóvenes tienen como pilar fundamental a María Auxiliadora, primera catequista; también a Jesús, misionero modelo; y finalmente a Juan Pablo II, como ejemplo de amor, servicio y entrega que desean imitar. Pero sobre todo poseen su corazón misionero, el cual en su día a día se renueva con el Espíritu Santo, permitiendo mostrar su testimonio de vida en cada paso que dan y permaneciendo fuertes en las tempestades que afrontan en su vida.
“Tristeza y melancolía fuera de la casa mía” frase de Don Bosco, que siempre está presente en las reuniones del GMJP, y la cual se la demuestra mediante los diferentes juegos y dinámicas que se realizan siempre con gran dinamismo y una sonrisa reflejada en los rostros de cada uno de sus miembros. A pesar de que los encuentros han sido pocos, la alegría y el espíritu salesiano siguen fortaleciéndose para poder llegar con gran éxito a su objetivo, el cual es atraer a más jóvenes para que vivan una experiencia misionera y así que su vida sea guida por Dios y alimentada por el Espíritu Santo.
Este grupo es llevado adelante por dos jóvenes, David Carpió y Paúl muy conjuntamente con Sor Elsye Yánez, quienes durante cada encuentro lo han coordinado a la perfección para que todos los miembros se mantengan constantes y así, hacer de este grupo, uno verdaderamente misionero en donde cada uno de los temas ya dados; como son: “la identidad del grupo”, “conociéndonos a nosotros mismos” y “¿Qué es un grupo misionero?” sean profundizados al ponerlos en práctica; además esperan que, con los encuentros que se den en el futuro se llame más la atención de los jóvenes para que se animen a vivir una vida entregada al servicio.
A lo largo del proceso de formación del GMJP se planea realizar varias experiencias de labor social, entre ellas están la visita a las comunidades de Shiña y Santa Isabel, lugares en los cuales se habían realizado las misiones de semana santa de este año. También se espera realizar actividades con orfanatos y asilos.
Seguramente, todos los jóvenes que participan en este divertido e interesante grupo misionero tendrán la oportunidad de conocer personas que se convertirán en amigos eternos, a más de encontrarse con Dios y renacer en una vida de amor al prójimo, lo cual les ayudara a mejorar en muchos aspectos de su día a día y crecer en valores como son: amistad, respeto, honestidad, perseverancia y justicia porque en ellos siempre estará presente el “ser sal y luz para el mundo”.