Kevin Vélez, Joven Corresponsal de IBEC, nos trae un interesante artículo acerca de la concientización.
Nos hace falta ver imágenes o videos que nos hacen llorar para en ese momento tomar una poco de consciencia, y a pesar de eso, volver a hacer lo mismo al día siguiente.
No somos dignos de llamarnos humanos si no tenemos consideración, y no sentimos aprecio por todos los seres que conforman el mundo.
Lecciones no del corazón, sino del alma es la que un gato a continuación nos dará.
Es el caso de un gato en Turquía, el cual al ver a su amigo (gato) que ha sido arrollado por un automóvil, se pone a darle reanimación cardíaca. También se recuesta en su lecho haciéndole sentir que no está sólo en esta lucha por la vida, brindándole calor al mismo tiempo. Al cabo de dos horas, un vecino lleva al gato herido al veterinario, quien destacó que el verdadero héroe fue su amigo, ya que si no hubiera sido por los masajes que le dio, esta sería probablemente otra
El ser humano por naturaleza propia, tiende a pensar en sí mismo (tenemos como ejemplo de dicha afirmación al sistema de producción capitalista) y se vuelve de repente un ser insensible, llegando a tal punto que podemos ver una persona o animal, que se está muriendo de dolor en la calle y hacemos nada.
Dejemos esto de lado, despojemos nuestros corazones de dichas aptitudes y abramos las puertas a la solidaridad, al espíritu, cambiemos el mundo. Dejemos de maltratar.
¡Si tienes una mascota, cuídala; si tienes un hijo preocúpate por él, si tienes un corazón, demuéstralo!