En un mundo en donde estamos experimentando constantes cambios sociales, culturales, económicos, políticos, etc. Es necesario formar estudiantes con pensamiento crítico y que sean capaces de encontrar soluciones factibles a los diferentes problemas que enfrenta la sociedad, mediante la relación de sus conocimientos con su realidad. Por esta razón, me pregunto si la educación tradicional es capaz de formar alumnos con destrezas suficientes para desenvolverse en su medio social.
Asistir a un centro de formación educativa no implica simplemente que los profesores impartan conocimientos y los estudiantes los adquieran, o solamente se enseñe y aprenda, sino un espacio donde se logre establecer un nexo entre los conocimientos y la sociedad.
Actualmente han aparecido las famosas: “educaciones alternativas”, donde colocan al estudiante en el centro de la enseñanza y se fomenta su participación dentro de la comunidad. La educación alternativa es aquella que acepta las diferencias de los estudiantes e intenta hacer de las mismas, factores para alcanzar el desarrollo integral del alumno para así desarrollar su identidad y autonomía.
Una educación alternativa es también una educación integral, participativa, donde la opinión de cada estudiante es escuchada y valorizada. Asimismo, busca fomentar el respeto, la convivencia, la tolerancia, el pluralismo y obtener una educación donde se construya la felicidad del alumno y profesor para así obtener un aprendizaje de calidad.
Actualmente, las instituciones que se rigen por la educación tradicional se han convertido poco a poco en espacios cerrados, llenos de reglas rígidas e impuestas que solo consiguen hostigar a los estudiantes, causando un ambiente pesado donde ellos no se pueden desenvolver correctamente. Igualmente, esta forma de enseñanza busca únicamente comprobar el conocimiento del alumno mediante pruebas y tareas donde solo se refleja que este retiene los conocimientos, mas no intenta demostrar que éste puede ponerlos en práctica.
Son todos éstos factores los que me llevan a cuestionar si realmente, como estudiantes, estamos aprendiendo para la vida o sólo para abastecernos de información que a la larga nos llevarán solamente formar parte de la cultura de la sumisión y no nos ayudarán a ser ciudadanos con pensamiento crítico y capaces de resolver problemas y tomar decisiones por si solos. No basta conocer fechas de independencia, teoremas, fórmulas, teorías, etc., para tener éxito en la vida, sino también tener la capacidad de ponerlos en práctica en situaciones de la vida real, para relacionarlos de forma concreta y así aprender de ellos de una manera más óptima y eficiente.
Hoy por hoy, existen diferentes sistemas educativos alternativos, como por ejemplo el método de Waldorf, en el cual se fomenta el desarrollo artístico de los estudiantes mediante trabajos manuales, así como el desarrollo de sus capacidades de pensar para llegar a tener criterio sobre la vida, para guiarse y encontrase a sí mismo, mediante un ambiente libre y cooperativo.
Encontramos también el método Montessori desarrollado por la doctora María Montessori, el cual se basa en la curiosidad innata de los estudiantes por aprender del medio circundante, y a la vez en su capacidad de elección mediante sus impulsos interiores. Este método divide a los niños en tramos de edad, buscando que los más pequeños aprendan conjuntamente de los más grandes.
Otra propuesta pedagógica es la técnica Freinet, iniciada por Celestin Freinet en Francia, la cual busca renovar radicalmente la forma popular de educar. Este método se basa en la vida cotidiana del alumno y su desenvolvimiento en la comunidad para motivar su vida escolar e iluminar sus sueños y aspiraciones.
En común, estos métodos tienen el objetivo de cambiar la educación tradicional, y se centran en el desarrollo de las diferentes capacidades del alumno para fomentar su desenvolvimiento en el medio, con pensamiento crítico y reflexivo. Buscan marcar al estudiante en su vida para construir un ciudadano del mundo con visiones y concepciones propias que le conduzcan diariamente a encontrar su verdad acerca de la sociedad.
Las nuevas formas de aprender deberían trabajar en conjunto con las tradicionales, para enriquecerlas, fortalecerlas y mejorarlas. De esta manera, se debe buscar poner en práctica lo aprendido en situaciones donde podamos plantearnos todas las posibles soluciones a los diferentes problemas postulados. Donde, a su vez, se aplique el razonamiento del estudiante en hechos concretos donde pueda observar causas y efectos.
Las escuelas de hoy deben dejar a un lado la concepción de que si un estudiante no rinde bien en pruebas, trabajos, etc., es un individuo inútil e incapaz. Lo que no se dan cuenta es que cada persona es distinta y diversa en cuanto a sus capacidades y habilidades, por lo tanto es cuestión de encontrar aquello en lo que éste puede desenvolverse de la mejor manera, pueda participar de forma activa, logre encontrar sus intereses y pasiones, y sobre todo se fomente el esfuerzo de auto educarse y la capacidad de reflexionar sobre su aprendizaje, para que no vean al estudio como un peso o una obligación más sobre su vida, sino como un bello arte que lo llevará a alcanzar la sabiduría y la excelencia.
Recordemos que: “Educar no es dar carrera para vivir, sino templar el alma para las dificultades de la vida”. (Pitágoras)
Por:
Arianna Izurieta
Joven Corresponsal
Colegio Cardenal Spellman Femenino
Bibliografía
http://www.slideshare.net/hugomart/educacin-para-el-siglo-xxi-nuevas-formas-de-aprender-y-nuevas-oportunidades-para-la-enseanza-14032886
http://portal.educ.ar/debates/educacionytic/inclusion-digital/nuevos-tiempos-nuevas-tecnologias-nuevas-formas-de-ensenar-y-aprender.php
http://domingomendez.blogspot.com/2012/01/hacia-un-cambio-metodologiconuevas.html