Viviana Estrada, Corresponsal de IBEC nos trae un interesante artículo acerca de la educación.
Los posgrados y las maestrías, dejaron de ser un lujo dentro del ámbito profesional y de la educación, para convertirse directamente en una necesidad a nivel profesional. Esto genera más oportunidades de trabajo y beneficios para quienes los realizan.
Una maestría es la continuación de los estudios de pregrado, es decir de la carrera universitaria, que se presenta como un programa de preparación académica especializada que se enfoca en un área específica. Desarrollan, analizan y plantean soluciones a problemas complejos y cotidianos, que se presenten frente a los distintos acontecimientos en la vida.
Debido a esto podemos decir que hoy en día, se ha vuelto una herramienta indispensable en el currículum de las personas, y un requisito para alcanzar puestos de mayor jerarquía, o ascender dentro de una organización.
Este tipo de preparación, estimula el desarrollo y la capacidad de análisis de los profesionales, que se enfrentan diariamente a nuevos retos, con los que tienen que lidiar y buscar de manera inmediata una solución, por lo que la continua preparación es la manera de lograrlo.
Otro factor positivo que otorga la educación de cuarto nivel, es la motivación de las facultades de liderar organizaciones, buscando potenciar las aptitudes de los empleados en dirección al progreso. Además, incrementa la competitividad de las empresas, y son una ventana para que el mercado se vaya desarrollando en todo nivel.
Si bien es cierto que su costo tiende a ser muy elevado, sin duda alguna, es una inversión con una ganancia clara a corto y largo plazo. La maestría te coloca en un nivel intelectual, en el que indiscutiblemente podrás desarrollar las competencias aprendidas en teoría, aplicándolas ante escenarios reales y mejorando el desempeño laboral; en efecto se vuelve más favorable económicamente hablando.
Por esta razón, los gobiernos de varios países ofrecen cada vez más oportunidades de becas para este tipo de estudios, pues consideran que el beneficio es para el progreso continuo del país. Esta inquietud propicia cada vez más a que instituciones públicas y privadas, difundan programas de especialización asequibles para todos los interesados.
En Ecuador en el 2010, el gobierno tomó la decisión de otorgar 150 becas de doctorados y maestrías, en las mejores universidades en el exterior, a docentes universitarios y a la ciudadanía a través de la Senplades y el Senacyt; con el fin de rectificar el compromiso con la educación superior del país, y generar a futuro un progreso notable.
Por otro lado, universidades como la FLACSO, ESPOL, Universidad Católica Santiago de Guayaquil, Universidad Técnica de Machala, Universidad Particular de Loja, Pontificia Universidad Católica del Ecuador entre otras, ofrecen capacitaciones, doctorados, posgrados y maestrías, para de igual manera contribuir en la educación de la nación y el fortalecimiento de las capacidades humanas.
Es importante para los profesionales en la actualidad, generar ese valor agregado en su formación académica, pues originan muchos beneficios no solo económicos, sino más bien de ese aporte que se otorga para ayudar en la producción de un país.
Bibliografía:
· Página oficial del Ministerio de Educación del Ecuador
· Páginas de Universidades Nacionales
· Datos de maestrías.