A menudo se asocia a los jóvenes y nuevas tecnologías con entretenimiento. Es verdad que las nuevas generaciones utilizan el ordenador para navegar por internet, descargar música o películas, ver el correo electrónico o chatear, pero también es cierto que en las encuestas realizadas hasta ahora los jóvenes afirman usar dichas tecnologías para la búsqueda de información.

No hay duda de que Internet es un gran avance, que puede servir de ayuda a nivel académico y también social; el problema surge en el momento en que su uso se descontrola. Para prevenir este uso inadecuado en jóvenes, es importante el papel de los padres a la hora de marcar los límites y permitir el uso de esta tecnología durante un tiempo prefijado y para el fin perseguido en cada momento.

Cabe destacar que gracias al avance de la tecnología y el internet se ha logrado reemplazar algunos trabajos incómodos o difíciles, aunque a veces los jóvenes no lo valoren, este factor como lo es el internet, ha sido una herramienta que ha reemplazado el trabajo de buscar información en libros. Muchas veces se puede escuchar a los padres decir que en sus tiempos, cuando ellos iban a la escuela y debían hacer una tarea de investigación no podían recurrir al internet, donde se encuentra una cantidad inmensa de páginas web que nos brindan la información que necesitamos. Por el contrario, como nuestros padres no contaban con esta importante herramienta debían ir a la biblioteca y leer muchos libros. Además los adultos no tenían la facilidad de imprimir o fotocopiar la información; por lo tanto debían escribir un montón. No es que se exprese que usar libros de la biblioteca sea malo, debe recordarse que los libros son alimento para la mente y que la información de los libros es 100% más segura. Por eso al buscar información en internet se debe de leer y analizar muy bien la información encontrada.